sábado, 19 de septiembre de 2009

UNA POLÍTICA CRIMINÓGENA

***
DIVAGACIONES A PARTIR DE
RECIENTE BOLETÍN DE LA GOBERNACIÓN DE RISARALDA
FRAUDE A LA INTELIGENCIA










PEREIRA:








El Secretario de Gobierno de Risaralda, Germán Darío Saldarriaga abanderados de la Campaña que viene impulsando la Administración Departamental “Hazle Presión a la Olla”.

Durante el encuentro que se realizó en el Comando del Departamento de Policía de Risaralda, Saldarriaga Arroyave, manifestó que ante la falta de denuncias y colaboración de la comunidad para que las autoridades puedan desmantelar los expendios de alucinógenos, la Gobernación de Risaralda y la Policía Nacional han puesto en marcha esta campaña que busca que la comunidad de manera anónima o macando el 123 informe a las autoridades donde se encuentran estas “ollas”.

Indicó que tanto en los consejos de seguridad, como en las encuestas presentadas por el Gobierno Nacional, el factor de drogadicción adquiere una importancia relevante a la hora de determinar cuáles son las principales causas que generan inseguridad y más aún si la misma comunidad por temor o indiferencia es permisiva con los lugares donde se venden los alucinógenos.

“Con esta campaña se busca concientizar a toda la comunidad del departamento de hacerle “presión a las ollas” como se les conoce popularmente a los expendios de estupefacientes. La idea es que la comunidad denuncie para poder realizar operativos, judicializar a los culpables y realizar labores de inteligencia alrededor de esta problemática”, dijo el funcionario.

Saldarriaga Arroyave agregó que los predios donde se venda droga serán objeto de la ley de extinción de dominio "de esta manera si estaremos librando la batalla contra el narcotráfico", explicó.

“Es un problema creciente y tenemos que acabar con las ‘ollas’ antes que ellas acaben con nosotros, con nuestros jóvenes, con nuestros niños”, Acotó.





***
Para pensar:
LAS "OLLAS" IMPLANTES FORANEOS O EXPRESIÓN DE PROBLEMÁTICAS ENDÓGENAS
LA DINÁMICA DE LAS OLLAS Y FORMAS DE CONTROL SOCIAL Y SUPERVIVENCIA EN MEDIOS DEMPRIMIDOS
OLLAS Y CONSUMIDORES:
ESTRATOS: menos
ESTRATOS: medios
ESTATOS: altos
DEL CONSUMO DE LA VIL CHIRUZA AL DE LA ENCUMBRADA HIDROPONICA
EFECTOS CRIMINÓGENOS DE LA PRESIÓN A LAS OLLAS
ENCAR(N)ECIMIENTO DE LA COMPETENCIA
AGUDIZACIÓN Y AMPLIACIÓN DEL SÍNDROME DE ABSTINENCIA, AUMENTO DE LA IRRITABILIDAD Y SU TRADUCCIÓN EN EL AUMENTO DE LA VIOLENCIA INTRAFAMILIAR Y CALLEJERA.
*
DEFINITIVAMENTE UNA POLÍTICA BOBA PARA UN PUEBLO EMBRIAGADO
***

PARA TENER EN CUENTA

Recibido de parte de la Defensoría del Pueblo:




NACIONES UNIDAS Comunicado de prensa
xxxxxxxxxx
Declaración de la Relatora Especial sobre la situación de los defensores de derechos humanos, Margaret Sekaggya, al término de su visita a Colombia
xxxxxxxxxx
BOGOTÁ, 18 de septiembre de 2009 – Del 7 al 18 de septiembre, realicé una visita de investigación para evaluar la situación de los defensores de derechos humanos en Colombia, y viajé a Bogotá, Barranquilla (Atlántico), Medellín (Antioquia), Cali (Valle del Cauca) y Arauca (Arauca). Me reuní con el Presidente, el Vicepresidente y otros funcionarios de alto rango del ejecutivo; con jueces de la Corte Suprema de Justicia y la Corte Constitucional, y la Oficina de la Fiscalía General de la Nación; así como con congresistas. Además, me entrevisté con los Jefes de la Policía, el Ejército y el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS). Asimismo, celebré reuniones con funcionarios del Gobierno local en las cuatro regiones que visité. También me encontré con miembros de la comunidad diplomática y los organismos de Naciones Unidas en la capital. Finalmente, en el transcurso de la misión, me reuní con un amplio y diverso sector de la sociedad civil colombiana.
Agradezco encarecidamente al Gobierno de Colombia su invitación y su colaboración ejemplar a lo largo de toda la misión. Asimismo, doy las gracias a todos los defensores de derechos humanos con quienes me reuní, algunos de los cuales viajaron desde muy lejos para verme. Por último, quisiera expresar mi agradecimiento a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colomina (OACNUDH) por su valioso apoyo tanto durante la misión como en la fase de preparación.
Si bien ahora he de tomarme un tiempo para revisar y analizar la importante cantidad de información que he recibido, así como para continuar intercambiando información con el Gobierno, los defensores de derechos humanos y demás interlocutores, quisiera presentar aquí unas cuantas observaciones preliminares y recomendaciones.
En primer lugar, deseo encomiar al Gobierno por la mejora significativa de la situación general de seguridad en el país desde 2002. Han mejorado tanto el respeto por el derecho a la vida como el ejercicio de las libertades fundamentales para los ciudadanos colombianos.
Además, deseo saludar al Gobierno por haber concebido políticas y estrategias para la protección de los defensores de derechos humanos. Celebro el aumento notable de fondos dedicados al Programa Nacional para la Protección de los Defensores de Derechos Humanos (de 13 millones de dólares en 2002 a 40 millones de dólares en 2009). Apoyo asimismo el trabajo de las Defensorías del Pueblo nacionales y regionales, en particular su sistema de alertas tempranas, y considero que sus informes deben hacerse públicos y ser tenidos en cuenta con mayor frecuencia por el Comité Interinstitucional de Alertas Tempranas (CIAT). Asimismo, felicito al Gobierno por la adopción de la Ley de Inteligencia y Contrainteligencia, y le insto a implementarla lo antes posible.

Dada la situación actual de polarización, considero notable que el Gobierno y la sociedad civil hayan logrado concluir una serie de acuerdos a través de las mesas para las garantías de protección de los defensores de derechos humanos. Observo con especial satisfacción que, tras mi reunión con él, el Presidente Uribe declarara públicamente el 17 de septiembre de 2009 que:
“la defensa de los derechos humanos es una acción necesaria y legítima para la democracia, en un país como Colombia que tiene el orgullo de estar plenamente abierto y dispuesto al escrutinio internacional en esta materia. “
Espero que esta declaración ayude a reducir la tensión y contribuya a mejorar el clima de diálogo entre el Gobierno y los defensores de derechos humanos. Con este nuevo avance, insto al Gobierno a implementar diligentemente los acuerdos alcanzados con los defensores de derechos humanos en materia de garantías para su trabajo; a proseguir con el diálogo; y a dar prioridad a las investigaciones de las amenazas recibidas por los defensores que participaron en las mesas de garantías para defensores de derechos humanos.
Si bien reconozco los esfuerzos del Gobierno mencionados anteriormente para mejorar la situación de los defensores de derechos humanos, aún queda mucho por hacer para garantizar un entorno seguro y propicio para los defensores de derechos humanos. A la luz de lo que he visto y oído en los últimos 12 días, puedo concluir que siguen existiendo en Colombia patrones de hostigamiento y persecución contra los defensores de derechos humanos, y a menudo contra sus familiares. Periodistas, sindicalistas, magistrados, abogados, activistas estudiantiles y juveniles, mujeres defensoras, líderes indígenas y afrocolombianos, así como activistas LGBT han sido asesinados, torturados, maltratados, desaparecidos, amenazados, capturados y detenidos arbitrariamente, judicializados, vigilados, desplazados por la fuerza, u obligados a exiliarse; o bien se han allanado sus oficinas y se han robado sus archivos, a causa de su trabajo de defensa de los derechos humanos y libertades fundamentales. Al parecer, algunas de estas violaciones hay que atribuirlas a miembros de la guerrilla, a nuevos grupos armados ilegales y a grupos paramilitares que, según los defensores de derechos humanos, no han sido desmantelados. El Gobierno tiene la responsabilidad de denunciar e investigar de manera exhaustiva estas violaciones y enjuiciar a sus autores. Sin embargo, según distintas fuentes, la fuerza pública también ha cometido violaciones contra defensores de derechos humanos, o ha mostrado complacencia con respecto a las violaciones cometidas por actores privados contra los defensores.
En particular, me preocupa profundamente el fenómeno tan extendido de las amenazas provenientes de autores desconocidos contra defensores de derechos humanos y sus familiares, que con frecuencia se materializan a través del envío de panfletos, sufragios, correos electrónicos, llamadas telefónicas y mensajes de texto. Estas amenazas generan un clima de miedo dentro de la comunidad de defensores de derechos humanos. Es necesario que la policía se tome estas amenazas en serio adelantando sistemáticamente investigaciones y haciendo que los autores comparezcan ante la justicia. En este contexto, deseo señalar que las amenazas contra magistrados de la Corte Suprema de Justicia debilitan el sistema de justicia en su conjunto, fomentan la impunidad y, por ende, repercuten negativamente en el trabajo de los defensores.
Un motivo fundamental de la inseguridad de los defensores de derechos humanos radica en la estigmatización y el señalamiento sistemáticos de que son objeto por parte de funcionarios del Gobierno. Haciéndome eco de la declaración del Relator Especial sobre ejecuciones extrajudiciales al término de su visita a Colombia, el 18 de junio de 2009, los defensores de derechos humanos en repetidas ocasiones han sido acusados por altos funcionarios del Gobierno de ser "terroristas" o "guerrilleros", o de estar operando en secreto con ellos. La declaración pública del Presidente Uribe reconociendo el trabajo legítimo de los defensores de derechos humanos, y las realizadas recientemente por el Vicepresidente y el Ministro del Interior y Justicia son pronunciamientos importantes para la comunidad de derechos humanos. Es asimismo importante que la Procuraduría General de la Nación siga investigando las declaraciones hechas por servidores públicos en relación con defensores de derechos humanos, que son extremadamente nocivas para el trabajo de estos últimos.
La impunidad por las violaciones cometidas contra los defensores de derechos humanos también contribuye enormemente a su inseguridad. Si bien tomo nota de las investigaciones en curso en relación con las actividades ilegales de agentes del DAS, la Oficina de la Fiscalía General de la Nación debería hacer más para investigar cabalmente las violaciones de derechos humanos contra defensores de derechos humanos y enjuiciar a los responsables. El Estado debe facilitar recursos adicionales para resolver efectivamente todos los casos de violaciones de derechos humanos contra defensores. Celebro la reciente creación de las Unidades de Asuntos Humanitarios en la Oficina de la Fiscalía General de la Nación, y espero que pronto se obtengan resultados concretos. Por último, me preocupa también el hecho de que algunos fiscales operen desde instalaciones militares, lo que arroja dudas sobre la independencia del poder judicial en Colombia. Recomiendo que la Fiscalía General de la Nación aborde esta cuestión.
En cuanto a la seguridad de los defensores de derechos humanos, se me informó de que el Gobierno está reformando el Programa de Protección para Defensores de Derechos Humanos del Ministerio del Interior y Justicia. Algunos elementos importantes de dicha reforma deberían tener en cuenta las necesidades especiales de las mujeres, los pueblos indígenas y los afrodescendientes. Sugiero encarecidamente que los agentes del Estado que defienden los derechos humanos (magistrados, y miembros de las Defensorías regionales y nacionales) sean incluidos en dicho programa. Además, debería simplificarse y agilizarse el proceso de solicitud de medidas de protección. También hay que resolver la cuestión del espionaje a defensores de derechos humanos por parte de los escoltas asignados para su protección. Además, deberían ampliarse las medidas preventivas del programa. Por último, los defensores de derechos humanos han manifestado su inquietud por la privatización de este programa, una cuestión que debería ser debatida y resuelta conjuntamente.
Me preocupa asimismo la información sobre el seguimiento y la interceptación por parte de los servicios de inteligencia civiles y militares sufridos por defensores de derechos humanos nacionales e internacionales, entre ellos magistrados de la Corte Suprema de Justicia, el anterior Relator Especial de las Naciones Unidas sobre la situación de los derechos humanos y las libertades fundamentales de los pueblos indígenas en 2005 y la Relatora Especial para los derechos de la mujer de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en 2005. Celebro que la Oficina del Fiscal General de la Nación esté enjuiciando actualmente a al menos 40 funcionarios del DAS, incluidos cuatro de sus antiguos directores. No obstante, sigo preocupada por la posible continuación de los seguimientos. En caso de que persistan estos seguimientos ilegales, insto al DAS a ponerles fin inmediatamente. El Ministerio de Defensa, el DAS y la Procuraduría General deberían crear un mecanismo para depurar todos los archivos de inteligencia sobre defensores de derechos humanos, sus familiares y sus organizaciones, con la asistencia de la OACNUDH y la comunidad internacional. Esto debería acompañarse de una redefinición por parte del aparato del Estado de los objetivos de sus actividades de inteligencia, mediante la instauración de un control democrático de estas actividades. Por último, debería garantizarse a los defensores pleno acceso a la información de inteligencia que les concierne.
En relación con la recabación de información de inteligencia sobre defensores de derechos humanos, quiero expresar mi grave preocupación por las capturas y detenciones arbitrarias (a veces masivas) de defensores de derechos humanos, así como por los procesos penales infundados iniciados contra ellos, sobre la base de informes de inteligencia militares o policiales, y de testimonios de personas desmovilizadas o de informantes a cambio de beneficios legales o pecuniarios. Las oficinas de la Procuraduría y la Fiscalía General de la Nación deberían investigar cabalmente todos los abusos y castigar a los culpables. Además, el Gobierno debería restaurar el buen nombre y la reputación de los defensores que hayan sido víctimas de la arbitrariedad del Estado.
Presentaré mi informe completo con las conclusiones finales y las recomendaciones ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en marzo de 2010.
***

FRASE

***

URIBE ES UN CHAVEZ CON CARA DE ÁNGEL

CHAVEZ ES UN URIBE CON CARA DE DIABLO




***

miércoles, 16 de septiembre de 2009

TROGLODITAS ... QUE LOS HAY LOS HAY!



Cualquier parecido con lo que pudieron ver, experimentar y escuchar en las aulas de clase del ITS los compañeros de mi hijo, es pura coincidencia. La responsabilidad por esta publicación la asumo de manera personal y directa, no fué solicitada por Jens. Esta anotación la hago sin consulta previa y "confieso" que no ha participación en grado alguno (coautoria, auxiliadores, etc.) de parte de alguno o de los estudiantes afectados.)




Comparto este espacio con mi hijo Jens Jürgen para expresar su "inconformidad" frente a procedimientos que en mi concepto confirman la presencia trogloditica en nuestro entorno:









Menos pelo = ¿Mejor Obrero?



Estando tranquilo en clase, conversando con mis amigos, y esperando un día de estudio normal como todos, irrumpe una redonda presencia, con apariencia de leñador que con una Corleonesca voz interrumpe las actividades… “Me hacen el favor, y toda esa parranda de peludos (nótese lo fácil que es convertir un adjetivo como cualquier otro en un insulto) el lunes me vienen motilados, o sino ni se me aparezcan por acá” mientras mis compañeros gritaban y se quejaban, de mi lo único que nació fue poner mi palma en alto, mientras Hitle… perdón, quise decir (no usemos nombres) la persona “X” se retiraba del aula (hubiera gustoso gritado SIEG HEIL pero tal era la algarabía de los estudiantes que “X” ni siquiera lo hubiera escuchado). Cabe recalcar que todo esto ocurrió mientras la persona “Y” pasaba por las demás celdas (creo que esa palabra se adapta mucho mejor que “salones”) regando las mismas ordenes.



Ahora tendría que explicar el porque el titulo, desde el momento en que pisamos los pasillos nos meten en la cabeza que nosotros tenemos que trabajar, trabajar, y trabajar como burros, no interesa que sepamos mucho, que seamos cultos, conocedores ni muchísimo menos eruditos, entre menos se desarrollen nuestros cerebros y mas ordenes sigamos sin preguntar “¿por qué?” mucho mejor, y al parecer tener el cabello largo (piercings y otras cosas, que ahora van por fuera de este escrito porque no entran en el problema del momento) nos vuelve peores trabajadores, tal vez nos transforma intelectuales que piensan antes de actuar, que no tragan entero y que, por tanto, no les convienen a ellos (por supuesto que peludos brutos también hay, pero al parecer, no a los ojos de ellos).



“Peludo” se convirtió en una palabra de alto calibre, “peludo hijuep…” se ha vuelto una redundancia como “suba pa’ arriba” o “baje pa’ abajo”… Escuchamos montones de frases degradantes todos los días y en todo lugar, pero, mientras las distingamos como broma (cuando lo son) no hay problema, la cosa es que llegue alguien con supuestamente mas autoridad y derechos que uno, supuestamente mas “inteligencia” y “sabiduría” (por ser unas cuantas décadas (décadas en las que probablemente ni un libro leyeron) mayores) a decir con el índice estirado “usted es peor persona por ser peludo, usted no sirve para nada por ser peludo, usted mete vicio, usted no tiene padres que lo instruyan, usted, usted, usted…” y no tener mayor opción que agachar la cabeza y pasarse la maquina número tres esa misma noche para no ser expulsado, o no perder materias, ahí es donde se convierte en un problema.



Y cuando niegan un derecho tan fundamental como la educación por no pagarle mínimo tres mil pesos a la peluquera de la esquina, y lo echan del colegio, y lo tratan de vago, y le arruinan la hoja de vida, se convierte en un problema aún peor, del que emergen aún más problemas.



Ser tratado de homosexual (cosa que también esta mal, ya que la homosexualidad tampoco debería ser utilizada como un insulto), de atracador y de vicioso por tener el pelo largo, es un trato degradante para cualquier persona, digno de hablar con las autoridades (que de cualquier forma no ayudaran mucho, porque tampoco es que tengan un punto de vista muy positivo hacia las personas diferentes…



Es casi jocoso leer el manual de convivencia y encontrarse con nuestros DERECHOS, todo miembro de la comunidad educativa tiene derecho a la libertad de expresión y al libre desarrollo de la personalidad, y ver unos centímetros mas a la derecha en nuestros DEBERES, no se permite el pelo largo, no peinados “raros”, no piercings, no noviazgos, no cosas diferentes del uniforme, no pantalón bota tuvo, no camisa por fuera, no falda mas de 4cm arriba de la rodilla, no maquillaje, no, no, no, no… ¿No es una risible contradicción?



Y digo yo, como última reflexión para no irme prolongando con este texto.



¿Una educación fascista, discriminativa, ciega, burlona, inculta, homofóbica, sexista (etc, etc) merece ser siquiera llamada educación? ¿Unos dizque líderes que hacen esta clase de cosas merecen ser llamados líderes? ¿Un individuo con el cabello largo es peor estudiante, peor persona o peor trabajador que uno con cabello corto?



Jens Gärtner